Desde 2014, Ibiza tiene posee uno de los monumentos de arte moderno al aire libre más sorprendentes de España. En primer lugar, destacan las dimensiones de las 13 columnas que lo forman, de diferentes alturas, la más alta de ellas de 24 metros.
En segundo lugar, por su ubicación: a pocos metros de la costa y a apenas 50 metros de Cala Llentia, una pequeña playa de la costa oeste ibicenca poco conocida aunque, a su pesar, tras la construcción de este monumento la cala recibe un buen puñado de turistas a diario. También sorprende que un monumento de este tamaño se pudiera instalar a principios de 2014 sin avisar a las autoridades, a pesar de las protestas de grupos ecologistas que denuncian que el monumento fue construido sin licencia.

El Stonehenge ibicenco
Se trata de una obra de Andrew Rodgers realizada como parte de su serie de megamonumentos «Rhytms of Life». El mecenas de esta obra fue uno de los hombres más ricos del mundo: Guy Laliberté, conocido por ser el fundador del Circo del Sol (Cirque du Soleil) por lo que este tipo de excentridades no son extrañas. LaLiberté fue el séptimo turista espacial de la historia, viajando al espacio con una nariz de payaso. El monumento se encuentra entre la casa que GuyLaliberté posee en Cala Llentia y el mar.

La escultura creada por Andrew Rodgers está formada por 12 columnas de basalto situadas en forma circular. En el centro, se ubica la decimotercera columna, la más alta de todas y cuya parte superior encontramos una lámina de pan de oro de 23 kilates que se refleja durante el atardecer. Y es que este lugar, a la hora de la puesta de sol y con el monumento de Cala Llentia ha cobrado un aire especial y no deja indiferente a nadie. O lo amas o lo odias. Turistas, hippies y curiosos que se ven atraídos al atardecer al lugar, desde el que también se puede disfrutar de las vistas a Es Vedrà, parecen amarlo.

Pero… ¿Qué es el monumento de Cala Llentia?
Como todas las obras de arte moderno, el significado de las columnas de Cala Llentia es abierto y está abierto a cualquier interpretación personal. Se le ha bautizado como el reloj solar de Cala Llentia, el Stonehenge ibicenco, el monumento del creador del Circo del Sol o incluso se le ha comparado con una brújula para Ovnis. Otro motivo más para aquellos que ven en Es Vedrà un lugar magnético que atrae a seres de otros planetas.

Lo cierto es que el nombre real del monumento, Time and Space (Tiempo y espacio), es tan ambiguo que tampoco da muchas pistas de su significado. Andrew Rodgers dice que se inspiró en la sucesión de Fibonacci, una curiosa sucesión numérica en la que cada número es el resultado de los dos anteriores:
1,1,2,3,5,8,13,21…
La explicación de su creador es que el monumento representa el movimiento de los planetas alrededor del sol, por lo que el conjunto está alineado con la puesta del sol del solsticio de invierno. Conocer el significado de las curiosas marcas transversales que se encuentran en cada uno de los monolitos, el pan de oro y el porqué de tan colosal tamaño quedan como enigmas para todos los visitantes de este curioso lugar.

Las columnas y la playa de Cala Llentia no es el único atractivo del lugar. A poco más de 100 metros, también encontramos las puertas de Cala Llentia, otra curiosa obra de arte que merece la pena visitar.
¿Una brújula para OVNIs o un reloj solar?
Por último, aprovechamos para enseñarte la curiosa imagen de este monumento desde el cielo. La disposición elíptica de las columnas es bien visible desde el cielo. Muchos han querido ver un significado oculto en estas colosales esculturas.
Los que dispongan de un mayor sentido de la orientación pueden creer que estamos en una brújula para OVNIs. Sin embargo, si seres de otros planetas quisieran visitarnos se verían mucho más atraídos por otros elementos situados en Ibiza como el islote de Es Vedrà, las luces de las discotecas en las noches de verano o la espantosa chimenea de GESA.

El monumento de Andrew Rodgers sí que puede ser confundido con un reloj solar. La sombra de la columna central, la de más altura y coronada con un baño de oro, proyecta su sombra sobre algunos de las doce columnas que la rodean. Sin embargo, no hay manera de conocer qué hora simboliza cada columna por lo que queda al ingenio de cada uno averiguar la representación de esta obra.
Sin lugar a duda, el único significado que podemos encontrar en esta obra es totalmente subjetivo como en cualquier pieza de arte. Acercarte hasta el rincón de la costa de Ibiza donde se ubica Cala Llentia para valorar el lugar te merecerá la pena.