La Capilla de San Ciriaco, también conocida como Capella de Sant Ciriac, es uno de los puntos más interesantes de Dalt Vila, especialmente por la leyenda que la acompaña. Se trata de una capilla de devoción popular construida por el Ayuntamiento en 1754 en honor a San Ciriaco, patrón de la ciudad de Ibiza desde 1650. La capilla se encuentra en la calle San Ciriaco, una calle estrecha y muy empinada en pleno Dalt Vila que nos conduce a la Catedral de Ibiza. Debido a su emplazamiento, pasa desapercibida para muchos paseantes, pero merece la pena detenerse especialmente después de leer su historia.
La festividad en honor a este santo se celebra el 8 de agosto, coincidiendo con la fecha tradicional de la entrada de las tropas catalanas de Ibiza.
Delante de la capilla, en un espacio cubierto por una construcción posterior, se encuentra la entrada a la calla de los judíos, que formaba parte de la judería (zona habitada por los judíos) y que desembocaba en la calle Joan Román.
La leyenda
En el interior de la capilla, bajo el altar de San Ciriaco, se ve el principio de un túnel que relaciona este espacio con la entrada de los conquistadores cristianos. Cuenta la leyenda popular que en el año 1235, el hermano del gobernador musulmán de Ibiza indicó a las tropas cristinas la ubicación del túnel secreto. Al parecer, el gobernador «se entendía» con la mujer de su hermano y éste, por venganza, traicionó a su hermano y su pueblo facilitando la invasión por parte de las tropas catalanas.

El primer soldado que entró a través del túnel fue Joan Xico. En su honor, una calle de Ibiza recuerda su valentía con su nombre.
Festes de la Terra
En la actualidad, el 8 de agosto es uno de los días grandes en las celebraciones del programa Festes de la Terra, que conmemora las fiestas de Ibiza ciudad durante la primera semana de agosto. Durante la semana, se celebran diferentes eventos para festejar este día, entre los cuales destacan diferentes conciertos, aunque el día 8 de agosto es el que tienen lugar las celebraciones más tradicionales.
Como curiosidad, comentar que cuando los catalanes conquistaron Ibiza y quisieron escoger una celebración mariana, eligieron el 5 de agosto en honor a Santa María de las Nieves ya que era la fecha más próxima a la conquista de la isla (San Ciriaco, el 8 de agosto). Esta es la razón por la que en la isla encontramos tantas mujeres con el nombre de Nieves o Neus, a pesar de que Ibiza sea un lugar en el que ver nevar sea extraordinario.

El 8 de agosto por la tarde tiene lugar la tradicional berenada popular, una merienda que se celebra junto al mar al lado de es Puig d’es Molins. La tradición, hace décadas, congregaba a muchísimos vecinos que compartían sus tortillas y demás platos cocinados en casa con el resto de sus vecinos. Habitualmente las meriendas terminaban con una guerra de pepitas de sandía. En la actualidad, se invita a platos de paella y la fiesta en honor a Sant Ciriac tiene un componente reivindicativo sobre la isla de Ibiza.
El punto fuerte de San Ciriaco llega a las 12 de la noche, cuando se celebra un espectacular castillo de fuegos artificiales. Aunque en la última década ha ido variando el lugar desde el que se han tirado los cohetes, en los últimos años se ha asentado su ubicación definitiva, en el Muro, el dique que se encuentra dentro del puerto de Ibiza. Ver los fuegos artificiales desde cualquier punto del puerto o el Paseo marítimo es toda una tradición en honor a San Ciriaco, el patrón de Ibiza.