En pleno corazón de Santa Eulària des Riu encontramos este monumento dedicado a la payesa. Hasta los años 40, la gran totalidad de las mujeres ibicencas trabajaban en el campo y utilizaban la vestimenta tradicional. Poco a poco, la llegada del turismo fue variando la economía de Ibiza, que pasó de vivir básicamente de la agricultura al turismo.
El monumento representa a una joven payesa vestida con el traje tradicional y llevando un cántaro de agua, un trabajo habitual en la isla con gran cantidad de pozos y fuentes. La figura está situada sobre un pedestal en el que se lee «Homenatge a Sa Pagesa» (Homenaje a la payesa).

Como curiosidad, este monumento estaba colocado de espaldas al público, mostrando la trenza bajo el pañuelo a los paseantes. Unas obras en la plaza a principios del siglo XXI motivaron el cambio de posición.